- Guille quieres un kiwi?
No sabemos muy bien porqué, pero a mi madre se le ha metido en la cabeza que a mi sobrino le gustan los kiwis, suponemos que una vez comió uno y desde entonces ella
puntualmente compra kiwis que mi sobrino nunca se come y que acaba comiendose mi hermana cuando están ya pochos. Ella es así, como un vulgar Emilio (Aquí no hay quien viva)Esto me ha traido a la cabeza la primera vez que yo probé un kiwi. Hace de esto muchos, muchos años...
[modo Abuelo Cebolleta ON]
Estaba yo un sábado por la mañana en la tienda de mis padres con una de las dependientas, por aquel entonces aún no se habían divorciado así que yo tenía menos de 13 años, estamos hablando por lo tanto de hace 26 años (o más!!!)
Recuerdo que vino un representante a saludar, era lo que hoy llamaríamos un metrosexual, por aquel entonces lo llamabamos "el rarito" ,no sólo porque siempre fuera de punta en blanco, usara cremas y se depilara las cejas... es que además ¡¡era vegetariano!!! toda una novedad que muchos no entendíamos.
Venía el buen hombre de una frutería especializada que había en el Mercado Central de Valencia, había comprado entre otras cosas una fruta muy rara que nos enseñaba orgulloso, se llamaban "kivis" (no quigüis) unas bolas marrones peludas con una pinta muy poco apetecible. Nos explicó que eran importadas de Australia y que eran un manjar, eran tan caras que se vendían por unidades y cada una de ellas costaba 100 pesetas!!! 20 duros... que barbaridad!!
Ante nuestra cara de incredulidad porque aquello parecía cualquier cosa menos comestible, sacó una navajita, pelo uno de aquellos kivis y nos dio una rodajita a cada una, el resto se lo zampó él, que bien caro le había costado.
El sabor me sorprendió bastante por lo ácido que era y la verdad tampoco eran tan estupendo como nos insistía el señor, pero bueno, creo que fue la primera vez que probé una fruta exótica.
Cuando los kiwis empezaron a popularizarse me costó mucho dejar de llamarlos kivis y llamarlos como el resto de la gente...
[modo Abuelo Cebolleta OFF]
¿A que nadie se acuerda de la primera vez que probó un Kiwi?
