05 agosto 2009

Las gorras de los Tarín

Me vais a permitir que dedique este post a mi padre. Ya hace más de un año que murió y aún lo sigo echando de menos.

Mi padre era un hombre muy como os diria... "peculiar" Tenía lo que lo siempre he llamado "ideas de Bombero" creo que podría escribir un libro con todas las cosas que se le ocurrian, de hecho creo que daría para dos libros.

Hace muchos muchos años, cuando aún eramos una familia unida, a mi padre se le ocurrió la genial idea de que toda la familia salieramos los domingos con gorra, todos iguales. ¿Por qué? pues nunca hemos sabido porqué. Se empeñó en ello, fue una de sus muchas cabezonerías. Ahora con el paso del tiempo me da la sensación de que para él era una forma de sentir que tenía una familía. Mi padre debido a la guerra conoció a su padre a los 12 años y creo que nunca tuvieron una relación demasiado profunda, por eso pienso que para él era importante que todos fueramos identificados como familia de alguna manera.

Las gorras no eran unas gorras de esas de tela normal, no.... eran unas gorras hechas a medida, buenisimas, de una calidad superior, mi padre tenía un conocido que fabricaba gorras, atención, que estoy hablando de hace unos 35 años, entonces la gente no salía a la calle con gorra, sólo llevaban gorra los policias, los militares, la gente de uniforme o los señores mayores.

Fuimos hasta a que nos midieran la cabeza y nos hicieron unas gorras de tela escocesa a cuadros... he estado buscando algo parecido en internet, pero no he encontrado nada que se parezca ni de lejos... luego me he acordade de que hace años copié un dibujo de Sir Tim O'Theo, un personaje de tebeo que dudo que recuerde alguien, las gorras eran parecidas a la que lleva este personaje.

El tema de las gorras sigue siendo tema de conversación muchas veces aún en la familia, mis sobrinos se descojonan literalmente cuando lo contamos. Imaginaros la situación, mi padre con la gorra puesta, yo como siempre me han gustado las gorras, gorros o similares, encantada con la gorra, además me permitía meterme el pelo dentro y con eso parecía un niño, asi que yo con la gorra encasquetada y más feliz que una perdiz, mi madre, por no oirlo y no tener pelotera, con la gorra puesta, pero mi hermana.... mi hermana lloraba a moco tendido porque odiaba la gorra, que además de ser horrorosa, picaba....

Al final mi hermana salía con la gorra puesta por los cojones de mi padre, y ahí ibamos los cuatro, con la gorra de marras que más que unir a la familia servía para que mi padre pillara un cabreo del quince, mi hermana un berrinche y mi madre un mosqueo de narices, la única que pasaba de todo y que no tenía problemas con la gorra era yo. Eso si, llamar la atención, la llamabamos, ahí ibamos los tarines, bien identificados....

Era entrar en el coche y mi hermana se arrancaba la gorra, y así iba hasta que mi padre miraba por el espejo y se daba cuenta, entonces gritaba ¡¡PONTE LA GORRA!!! y ya la teniamos armada... lo que no sé es como no acabamos empotrados en un arbol por culpa de las dichosas gorras. Las gorras daban calor, picaban y te dejaban el pelo hecho un asco, yo no recuerdo cuanto duro el periodo "gorras" no creo que mucho porque mi padre igual que tenía una idea de bombero, la olvidaba, las que no hemos olvidado la historía de las gorras somos nosotras, las sufridas usuarias.

Por cierto que no tenemos ni una sola foto con las gorras....