Help Desk: Pulse usted control alt suprimir...

Dedicado a mis compañeros del banco ;)

Hace unos años trabajé en un "help desk", CAU o SAC los llaman ahora, de aquella época tengo muy buenos recuerdos ya que el ambiente de trabajo era muy agradable y la gente era muy maja, creo que me llevaba bien con todos. Dábamos soporte a los clientes de un banco.

Cuando trabajas dando soporte a usuarios siempre acabas con una buena colección de anécdotas divertidas, te encuentras de todo, desde el usuario amable que pone toda su voluntad, hasta el borde que esta por tocarte las narices.

Uno de los habituales que llamaba cada mes, siempre a última hora, cuando ya estábamos casi a punto de irnos, era el que conocíamos como "el del garaje" Era un usuario que cada mes tenía que crear los recibos del alquiler de unas plazas de garaje propiedad de su suegra. El hombre lo hacía en horas de trabajo y a escondidas de su jefe, pero como además era bastante torpe, cada mes llamaba para que le indicáramos los pasos a seguir, no contento con eso, pretendía que estuvieras al teléfono con él hasta que hubiera terminado todo el proceso, lo habitual era explicar al cliente cómo funcionaba el programa, hacer un par de recibos con él y luego decirle "ahora hace el resto igual y si tiene algún problema o duda me llama".

Pero el del garaje no, el del garaje exigía que siguieras con él, y como siempre llamaba faltando unos diez minutos para que terminara el turno, al que le tocaba la llamadita de "el del garaje" sabía que ya había pringado. Por eso cada fin de mes, todos mirábamos con aprensión el teléfono cuando sonaba a menos diez... y el que más y el que menos remoloneaba un poco por si acaso era "el del garaje" Al final con suerte cogía el teléfono alguno de los nuevos que aún no lo conocía. Era como un bautizo, hasta que no habías atendido una vez "al del garaje" seguías siendo un novato.

Lo gracioso de este hombre es que mientras hacía los recibos no paraba de decir "ay como me pille mi jefe me despide!! Ay ay, espera que me parece que viene!! Ay que si me pilla me echa!!" y entonces tu, viendo el cielo abierto le decías "bueno si quiere me llama luego, cuando le vaya bien" a lo que él respondía "NO NO!! Que si no hago los recibos mi suegra me mata!!!" Y encima se cabreaba si le ponías el mute!! Pobre hombre, entre el jefe y la suegra vivía amargado.

La gente que trabajamos en el help desk estábamos dividida en dos grupos, los del banco, que eran los empleados del banco y los pringaos, que éramos los que estábamos contratados por una ett, cobrábamos menos, trabajábamos más y teníamos menos vacaciones...

Entre los del banco había de todo, pero había uno tenía una jeta especialmente dura, era un especialista del escaqueo, el horario del help desk era de 8 a 19 y hacíamos varios turnos, este hombre tenía un pacto especial (no sabemos con quien) y hacia un horario de 11 a 20, con lo cual la última hora que estaba allí nunca he sabido muy bien que hacía aparte de tocarse los cojones como vulgarmente se dice.

Mi horario habitual era de 8 a 17 pero hubo un día que cambié el turno a una compañera, no recuerdo porqué. Eran ya casi las siete, hora de irnos cuando entra una llamada que atendió el individuo en cuestión. Contesta al teléfono, escucha lo que le dice el cliente y veo que le suelta con todo el morro del mundo "Eso va a ser el servidor, haga usted una cosa, ¿ha reiniciado el servidor? ¿Si? vale... pues mire, eso es que el servidor necesita reposar, apáguelo usted y déjelo toda la noche apagado, que repose bien... y mañana por la mañana lo prueba y si le sigue dando problemas nos llama"

Ah leches!!!! Ahí entendí yo porque me llamaban a veces clientes a primera hora contándome que ya habían dejado reposar el servidor toda la noche y que seguían con el problema....

A veces te encontrabas en situaciones apuradas, quien no se ha dejado el micro abierto creyendo que está en mute mientras comentas algo no muy agradable del usuario... a veces el cliente se lo tomaba bien y otras se pillaba un cabreo del 15.

Yo recuerdo una llamada que me hizo sentirme especialmente mal y eso que el cliente que atendí era un sol y se lo tomaba con filosofía, la llamada fue algo así:

Banco taltaltal buenos días, me llamo Eva ¿en qué puedo ayudarle?

Hola buenos días, mira es que tengo un problema, el programa se ha quedado bloqueado y no puedo salir.

Muy bien, mire vamos a pulsar control alt suprimir y...

No puedo

¿Cómo que no puede?

No, no puedo pulsar control alt suprimir... es que soy manco sabes? Trabajé en un taller de carpintería y una sierra me cortó el brazo. Control alt si que puedo con una mano, pero para pulsar suprimir le doy con el muñón y claro no puedo porque se pulsan un montón de teclas a la vez....

Tierra trágame.... ¿que se dice en esta situación?

Lo primero que me paso por la cabeza fue decirle que le diera con la nariz, pero al mismo tiempo pensé, ostras no, que como sea chato ya me muero....

Bueno pues no sé, haga una cosa, coja un lápiz o algo con la boca y pruebe a ver....

Ay pues sí, eso sí que puedo!!! Qué bien, espera, espera que pruebo!!!

Y pudo reiniciar el PC...

Ataques de risa II. Oye no tarda mucho la pizza?

Un comentario en mi post anterior me ha hecho recordar otro momento de esos que te tronchas de las risa y no puedes parar, esta será una historia cortita.

Una noche estábamos en casa una amiga, un amigo y yo, viendo vídeos de películas, el clásico plan de apalancamiento en casa vagueando. Cuando llegó la hora de cenar decidimos pedir una Pizza, ya el momento de hacer de hacer el pedido fue de cachondeo, lo típico que no te pones de acuerdo y la telefonista contribuye un poco, pero bueno, hicimos el pedido y seguimos viendo la película.

Termino la película, empezamos otra y cuando las tripas empezaron a rugir caímos en la cuenta..

Oye no están tardando mucho? que hora era cuando hemos pedido la pizza?

Decidimos esperar un rato y cuando estaba claro que la pizza estaba tardando demasiado decidimos llamar para averiguar que pasaba.

Hola, buenas noches, mira es que hace un buen rato que hemos pedido una pizza y nos extraña que no haya llegado porque hace ya un buen rato....

si... vale... es que... han atracado al repartidor!!!! os estamos haciendo otra y os la mandamos enseguida.

No sé como pude despedirme y colgar el teléfono!!! De todas las excusas que me podía imaginar la última que esperaba era que al pizzero le habían robado nuestra pizza!!! Creo que pocas veces he llorado de risa como en ese momento!!

Lo que ya no tuve valor fue para abrir la puerta al pizzero, se que me habría descojonado en su cara, pobre...

Ataques de risa I. Que me cagoooooooo

Cuando abrieron un restaurante chino cerca de casa Pedro y yo decidimos ir a probarlo. Era el primer día que tenían abierto, no recuerdo que comimos pero fueron muy amables con nosotros, luego nos hicimos habituales del local y posteriormente, cuando mi relación con Pedro ya había acabado seguí yendo porque me pillaba cerca del trabajo. Esta en Barcelona, en la Avenida del Paralelo, al final, frente al parque de las tres chimeneas. Os lo recomiendo.

Cuando terminamos de comer volvíamos a casa, andando porque estaba muy cerca, íbamos charlando tranquilamente cuando de repente Pedro se queda parado mientras yo sigo caminando. Sorprendida retrocedo y lo veo allí, inmóvil, blanco como el papel, con la frente llena de gotitas de sudor y con la mirada perdida al vacío...

¿Que te pasa? Pedro  que te pasa? joder tío estas bien?

Pedro que se queda inmóvil, callado como si no me oyera, yo me empiezo a asustar

y de repente se pone a andar rápido, con pasitos cortitos pero muy rápidos, marcha atlética creo que le llaman

Yo me quedo allí plantada y cuando reacciono corro detrás de él

¿pero que te pasa? Pedro, espera!!!

y de repente plaf! se queda otra vez quieto parado, respirando con dificultad y mirando al frente sin mirar.

¿Oye estas bien?

y se pone a andar de nuevo soltando un ¡me cago!

unos cuantos metros y parón de nuevo

yo flipo

¿Pero tío que haces?

Unos segundos parados, Pedro aguantando la respiración y yo mirándolo sin saber que hacer, noto que la risa me empieza a subir por la garganta, intento contenerla.

y de repente otra vez la marcha atlética!!! y yo corriendo detrás

Oye espera!!!

Déjame joder, que me cago!!! y no te rías!!!!

y de repente, parón!

Oye ¿que hago? ¿te puedo ayudar?

Y otra vez la marcha atlética, ¡mecago mecago mecago! 
descojone total, las piernas empiezan a flaquearme

Joder que no te rias!!!! Vete a la mierda!!

Y parón otra vez

En este punto yo ya no podía aguantar la risa, el cabreo de Pedro crecía de manera directamente proporcional a mis ganas de descojonarme viva, imaginaros la escena, una pareja que va andando tranquilamente y de repente se paran, corren, se paran, corren, como hacían los romanos para recorrer grandes distancias.

La llegada a casa fue triunfal, Pedro con su peculiar estilo romano y yo descojonandome detrás agarrándome a las farolas y apoyándome en los coches porque no podía andar de la risa. Estuvo cabreado como una mona varios días, como si la culpa fuera mía.

Lo mejor de todo, vivíamos en un quinto sin ascensor, os puedo asegurar que nunca en mi vida he visto a nadie subir unas escaleras tan rápido.

Proximamente: Me escurroooo

Regalos

Dentro de poco es el cumpleaños de una amiga y ya estoy dándole vueltas a ver que podría regalarle. Soy de las que piensa que cuando haces un regalo tienes que pensar en que le guste a la persona que lo va a recibir. Esa opinión de mucha gente de "como yo lo compro, compro lo que me da la gana" no la entiendo. Vale a que como dice el refrán, a caballo regalado, no le mires el dentado, pero para que regalar algo que se va a quedar abandonado en un cajón o que nunca se le va a dar uso.

Están los que te regalan lo que les gustaría que les regalaran a ellos, que dices... ¿pero desde cuando me han gustado a mi los libros de autoayuda sobre como enfentarte a tus miedos internos!!? o los que te regalan las cosas que te gustaban cuando tenías diez años, aún recuerdo una visita de mi hermana a Barcelona, comenté que tenía que comprarme una mochila, me regaló una mochila de Mickey Mouse, de colores rojo, azul y verde, lo más apropiado para la directora de un centro de estudios... acabé comprandome una negra que era mi idea original. O la camiseta del equipo ese de rugby que había en Barcelona, que me llegaba a las rodillas, como te gustan grandes... leches!! me gustaban enormes cuando tenía ocho años, pero desde entonces como el de la tónica, mi gusto ha cambiado, bueno va, pa pijama...

Atención, no quiero herir la susceptibilidad de nadie, no quiero que nadie piense, joer que tía más rancia, encima de que le regalan algo, no lo aprecia. Aprecio todos los regalos que me hacen y sé que hay gente a la que le cuesta mucho acertar con los regalos, que les cuesta ponerse en la piel de otra persona para intentar averiguar que les gustaría, y sé que hay gente a la que el solo hecho de tener que ir a comprar un regalos supone un problema porque no saben que comprar, de esta gente más que el regalo en sí, aprecio el hecho de que me hayan regalado algo, el regalo en sí mismo es que han perdido parte de su tiempo intentando comprar algo que me agrade.

A mí los regalos que me gustan de verdad son los que me han hecho solo para mi, son regalos personalizados que demuestran que la persona que los ha hecho ha pensado en ti, ha dedicado su tiempo a hacerte algo que espera que te va a gustar, y ya se sabe que el tiempo es oro, para mi tiene mucho más valor una postal hecha a mano con unos lápices de colores que un DVD de una película comprada a toda prisa, y ojo, no es que no me guste que me regalen DVD's, que la gente que me conoce sabe mis gustos y que me encanta tener los originales. También me gustan mucho los regalos que demuestran que esa persona realmente te conoce y sabe lo que te gusta.

Evidentemente me gusta que me regalen cosas, como a todo el mundo, pero hay regalos que guardas con más cariño que otros, yo tengo algunas cosas que cuando las veo me traen muy buenos recuerdos, como ejemplo pongo una foto de algunos regalos que me hicieron especial ilusión (entre muchos más que tengo) unos porque son enteramente personalizados para mí y otros porque demuestran que la persona que me los hizo me conoce muy pero que muy bien.

Veréis en la foto un par de cajitas, con mi nombre, una de ellas contenía un huevo pintado a mano, el decorado del huevo tiene mucho significado. Hay una alfombrilla de ratón, cualquiera que me conozca un poco puede entender el significado de ese montaje, ¿es un montaje perfecto? no, ya sé que no lo es, pero la persona que me regalo esa alfombrilla no es ninguna experta en programas de dibujo, y se esforzó para hacerme algo que me gustara ¿que puede valer más que eso? hay una caja con plumas y papel de carta dorados, mucha gente que no me conoce realmente bien pensará que es un regalo poco apropiado para mis gustos, la persona que me lo regaló sabe que acertó, fijaros en la base verde donde están los regalos, es una plantilla para cortar con cutter, me la regaló la misma persona, sé que es un regalo "raro" pero llevaba mucho tiempo con ganas de tener una.



Hay dos regalos en esa foto que me gustan especialmente, uno es un dosier con todas las frases y coletillas que en el momento del regalo solía decir, es genial ¿cuanto tiempo dedicaron a pensar en mi para recopilar todas esas frases? sólo son cuatro folios atados con una cinta, baratito, pero con un valor incalculable para mí. El otro es un dossier especial Top Secret que recoge algunos de los momentos más divertidos que hemos pasado y algunas de las fotos más espantosas que tengo!! pero destila cariño por todos los lados. Son cosas que puedo conservar y que cuando las vuelvo a ver me traen grandes recuerdos. Gracias Rancias.

Y estos no son los únicos regalos que guardo, tengo una rosa seca, chiquitita bendecida que me regalo Esther para que me diera suerte, la sigo llevando dentro de la maleta cuando viajo, aunque ella ya sabe que yo no creo mucho en esas cosas... sigo teniendo en el cuarto de baño los jaboncitos que me regalaron mis compañeras del banco cuando me fui (un sol, una estrella y una luna) y en mi puerta de entrada está colgado la cosa esa que hace ruidito cuando abres la puerta (no sé cómo se llama eso!!!) que también me regalaron.

Tengo una camiseta (por cierto talla S) con un perrito que se parece al mío que me regaló una amiga, para conseguirla estuvo participando en un concurso de radio toda una tarde, vale mucho más que si hubiera ido a comprarla, y un poster de una película de Brendan Fraser, para conseguirlo mi amiga tuvo que mover a todos sus contactos, no le costó un duro, pero me demostró lo mucho que me aprecia molestándose tanto para poder conseguirlo.

Hay tipos de regalos que me molestan especialmente, unos son los que regalan sin calentarse la cabeza, del tipo este año compro una licuadora a todas las chicas y unos calcetines a todos los tíos, y te regalan lo mismo que a la prima, a la tía y hasta a la novia, jolines, un poco de imaginación no? que menos que comprar algo diferente para cada una....

Luego están los regalos que te hacen con doble intención, os pongo un ejemplo, a mi me gustan los relojes grandotes, vale, MUY grandotes, de esos digitales mazacotes, si, sé que no es muy femenino, pero me importa un pito, me gustan así y así los llevo. Durante años, mis personas allegadas han estado regalándome relojes "femeninos" muy bonitos, si, muy caros, también ¿me los pongo? no, ¿por qué? porque no me gustan. Otro caso, mira, te he comprado unos pendientes, porque como nunca llevas... ¡alma de cántaro!! ¿Y qué te crees que no llevo pendientes porque no tengo? no llevo pendientes porque no me gusta llevar pendientes, vale que no soy rica, ¿pero no crees que mi economía me daría para comprar pendientes si realmente me gustara llevarlos? y encima, mira te los he comprado pequeñitos... pues sí que te fijas bien, que normalmente no llevo pendientes, pero cuando llevo los llevo enormes!!

Las cosas del corazón

En mi casa nunca hemos sido aficionados a las cosas estas de la prensa rosa, ni mi madre ni mi abuela han sido aficionadas a comprar revistas del corazón ni a seguir los programas de la tele que se dedican al famoseo, así que no tenemos una “cultura rosa” inculcada.

Mi único contacto con la “información Rosa” se produce en dos ocasiones, una es cuando coincido con mis sobrinos comiendo en casa de mi madre, mi madre suele ver a la Bea en Tele5 (sin comentarios) pero cuando ellos están, toman posesión del mando y nos hacen ver Se lo que hicisteis, un programa de la sexta que básicamente se dedica a criticar los programas del corazón de las otras cadenas.

Yo sinceramente prefiero ver al pequeñín y a la rubia, el problema es que la mayoría de las veces no tengo ni idea de quien son las personas que salen por la tele. Pero como sacan lo mejor de cada programa pues te ríes aunque no sepas quien es el pollo que sale en la tele. Que entre los “famosos” y los “periodistas” ya no sabes ni a quien están criticando, ni cual de ellos es el “famoso” porque el que un día es perseguido por la calle cuando sale de su casa, al día siguiente está de tertuliano en un programa comentando la jugada de otro “famoso”.

Yo le pongo voluntad, y pregunto quien es quien, e intento recordar los nombres, preo como hay tantos he de preguntar mucho, hasta que me envían a la mierda y me hacen callar… siempre he tenido poca retentiva para los nombres de los famosetes, que ya os digo que yo lo intento, pero joder, es que es muy difícil…

Normalmente pregunto a mi hermana que es la que más controla de estos temas de la familia, con eso de que es aficionada al cine pues siempre está más al pairo. La conversación suele ser más o menos asi:

y ese quien es?

el que está con fulanita

ah... y fulanita quien es?

La que se caso con meganito, el de gran hermano..

aha... y menganito...

joder Eva calla ya!! si no te interesa callate ya!!! es que no te enteras...

Mujer, no te pongas así, si yo es por aclarame...

Pues le preguntas a otro!!!!

Claro, como me voy a enterar si no me cuentan....

La otra ocasión es cuando voy a la peluquería, tengo el pelo largo y no voy demasiado, una vez al año o así. Normalmente mientras espero me suelen endiñar una revista del corazón para que esté entretenida, yo creo que como no soy habitual me dan las pasadas, no como a las habituales, que les dan la última que ha salido. La mía normalmente me enseña el posado de verano de Ana Oregon cuando estamos en invierno, pelados de frio o la decoración navideña de Isabel Presley cuando estamos a 35 grados. Y como no sé quienes son los señores de las revistas pues para que voy a leer lo que ponen si total me da lo mismo, así que paso las páginas y leo solo los dibujos (vamos que miro las fotos) y eso por no hacerle un feo a la peluquera.

En cambio la clienta habitual coge la revista que ya se sabe de memoria porque la tiene en su casa (tramposa….), y se lee de cabo a rabo todos los reportajes (¿lo que hay en esas revistas se llaman reportajes?) y los comenta con la peluquera y el resto de las parroquianas, y sabe la vida y milagros del que sale en la revista, y de las 3 generaciones anteriores y posteriores del mismo, se sabe todos los nombres, con quien se ha casado, divorciado, juntado, peleado… joder que memoria!!!! para que luego digan que la gente que sigue los programas basura y leen la prensa rosa tienen un bajo nivel intelectual, pues tendrán poco nivel, pero para alcanzar semejante nivel hace falta casi casi hacer un doctorado, vamos yo creo que ni tomando apuntes, para aclararte necesitas un esquema con dibujos y anotaciones y dedicarle muchas horas…

Antes era más sencillo, porque habían pocos famosos y más o menos era fácil recordarlos, eran actores, cantantes, gente que es normal que sea famosa, pero es que ahora con tanto gran hermano, y con tanta gente que es amiga del primo del cuñado del vecino de la que se acostó una noche con el tío del mecánico que le arregla el coche al último finalista de operación triunfo una no se aclara, esto no es serio.

Yo para disimular me hago la intelectual y digo que estas cosas no me importan, así parezco más interesante, pero la cochina verdad no es que no me interese, la verdad verdadera es que soy incapaz de retener tanta información, que ya os digo que yo le pongo voluntad, pero nada, no hay manera. Yo creo que toda la gente que critica la televisión basura es porque no se enteran, como yo, y les da rabia reconocerlo, y entonces quedan mejor diciendo que todo es basura, si si, será basura, pero mira tu la de gente que compra revistas y no se pierden el tomate ¿tanta gente está equivocada? y mira cuantos ven los programas sesudos que hacen en la dos a hora intempestivas, una minoría. A ver si va a ser que la razón la tiene la minoría, normalmente es al revés no?

Yo creo que si con las revistas regalaran algún tipo de guía ilustrada sería más fácil no perderse y la gente se animaría más a seguir las dichas y desdichas de los famosos de turno. Pero tal y como está montado actualmente es un cachondeo.

Y es por eso que yo de la tele, sólo veo los documentales de las 2, faltaría más…

Que sera, que sera?

Siguiendo con el viaje a Francia, la boda era en un pueblecito relativamente cerca de la frontera, esa noche nos alojamos en una especie de casa rural, en medio de la campiña francesa.

Las habitaciones estaban decoradas en plan rústico, bueno, mejor que decir que estaban decoradas, dejemoslo en que eran rústicas y eso por ser amable... Mi padre se quedó en una habitación y mi hermana y yo en otra. Las habitaciones tenían un bidet y un lavabo pero el retrete se encontraba al final del pasillo, a la antigua, las camas eran de esas tan blandas que te acostabas boca arriba y tocabas el colchón con las dos orejas....

La primera mañana nos levantamos a desayunar y cuando terminamos mi padre apareció con un misterioso paquete envuelto en bolsas de plástico.

Papá ¿Que es eso? le pregunté

NO LO TOQUES!!!!!

Me dejo acojonada, que había en ese misterioso paquete que no se podía ni tocar?

Subimos al coche y mi padre dejó el paquete en el maletero.

Pero Papá, que hay en ese paquete?

Nada

Como que nada? algo habrá dentro no? que es?

Nadaaaaaaaaaaa

Cuando estábamos en plena campiña francesa mi padre paró el coche en un andén, saco el paquete del maletero y desapareció con él detrás de unos arbustos y al minuto apareció con las manos vacías. Mi hermana y yo ya estábamos flipando e insitimos en saber que había dentro del paquete.

Nos hizo prometer que nunca jamás mientras estuviera vivo, contaríamos que había en el paquete. Ahora ya puedo desvelar el misterio. Mi padre era de los que cada mañana tenía su momento All-Bran, sin falta, y como en su habitación no había vater había usado unos periódicos que luego había empaquetado y envuelto en bolsas de plástico, todo por no ponerse unos pantalones e ir al baño del pasillo.

Os podéis imaginar el cachondeito que tuvo que aguantar el hombre durante todo el viaje, porque igual que en el chiste de las monjitas que les cae un paquete del cielo y cantan emocionadas mientras lo abren, que sera, que sera....

Aquello señoras y señores era una mierda empaquetá!!! ni mas, ni menos.

Las nenas cruzan la frontera

La primera vez que viaje "al extrajero" fue para asistir a una boda, no recuerdo quién se casaba, tenemos unos parientes en Francia de los que desconozco hasta el parentesco que nos une, nunca he tenido muy claro que pintaban estos parientes de Francia, eran familia de mi Padre, se casaba alguien y nos invitaron a la boda.

Como dejar las tiendas desatendidas durante todo un fin de semana era algo impensable, mi madre se quedó en Valencia y nos fuimos a la aventura mi padre, mi hermana y yo. El viaje era en coche, palizón para ir a una boda de alguien que no conoces, junto con un montón de gente que tampoco sabes quien es... menudo planazo... pero no había habido manera de escaquearnos...

Por aquel entonces aún existian fronteras en Europa, no era necesario el pasaporte pero si había que enseñar el DNI. Había una caseta "española" con una barrera y a unos 50 metros más otra caseta "francesa" con una barrera también, osea que pasabas por dos controles. Cuando llegamos a la frontera con Francia, paramos y mi padre saca el su DNI y se lo enseña al policía, este mira el DNI y dice, muy bien ¿Y las señoritas? mi padre que se queda a cuadros... son mis hijas... no tienen DNI... El policía que le mira, mira al otro poli que tenia detrás y.. ¿Libro de familia? mi padre que lo mira como el que ve un marciano ¿Libro de familia? pues no, mire usted señor agente, no llevamos el libro de familia... Muy bien, pues entonces no pueden cruzar la frontera.... ¡¡pero hombre como que no podemos cruzar?? mire usted que venimos de Valencia y vamos a una boda de unos familiares... si son mis hijas... nenas, decirselo a este señor... decirle que sois mis hijas... si, si, muy bien pero sin DNI o libro de familia las niñas no cruzan la frontera...

Imaginaros la papeleta.... 1000 y pico kilómetros y allí estábamos... sin poder pasar por la falta de previsión de mis padres, mi hermana y yo siempre hemos sido "las nenas" así que con 13 y 14 añitos que teníamos ya, a ninguno se le ocurrió pensar en que ya no eramos unas nenitas y que lo más normal era que fuéramos documentadas.

Mi padre que aparca el coche y se va a buscar a alguien que nos deje cruzar la frontera, de oficina en oficina con mi hermana y yo detrás, descojonándonos por la situación, con las pocas ganas que teníamos de ir a la boda aquello por lo menos era un punto de animación. Mi padre esperando para poder hablar con el comisario y mientras esperábamos nos decía, vosotras llorar, que vean que os da mucha pena que no os dejen cruzar, venga, llorar un poco.... joder, queréis llorar? y si, nosotras llorábamos pero de risa....

Finalmente la única solución era que alguien llevara el libro de familia al autobús que salía de Valencia para Francia y esperar en la frontera hasta que pasara el autobús y que el conductor nos diera el libro. Vamos, pasarnos todo el día allí hasta que llegara el autobús. Así que llama a mi madre (entonces no habían móviles, todo era a base de cabinas de teléfono), haz que se vaya cagando leches de la tienda a casa, a por el puñetero libro y a llevarlo a la estación de autobuses... y que le de tiempo porque si el autobús se va, hay que esperar al otro que sale al día siguiente....

Y allí que nos quedamos esperando, mi padre con un cabreo del quince y cabezón como era, sin perder la esperanza, evidentemente todo el personal que trabajaba en la frontera estaba al tanto de lo que nos había pasado. Era como un tigre al acecho, esperando cualquier oportunidad para poder encontrar a alguien que nos dejara pasar.

Finalmente el policía de la garita, nos dijo, que él nos habría dejado pasar, pero que claro, estaba el comisario delante y que no había podido, ahora el comisario se había ido ya, si hubiéramos llegado cuando el comisario no estaba, habríamos pasado. El pobre hombre que estaba bastante apurado por la situación, le comentó a mi padre en un intento de animarlo "De todas formas, en Francia no les hubieran dejado pasar...."

Y ahí fue donde el policía metió la pata, porque mi padre vio el cielo abierto... el comisario que ya se ha ido a comer...

¿Y si el francés nos deja pasar?

¿Cómo?

Si, si hablo con el francés y nos deja pasar ¿Usted nos deja pasar también?

Bueno, pero es que no les van a dejar

Bueno, pero si él nos deja?

Vale, bien, si el francés les deja pasar, yo les dejo pasar...

Y p'alla que se va mi padre, a la caseta del francés con mi hermana y yo pisándole los talones preguntándonos que leches le va a decir mi padre para que nos deje pasar...

Y llega mi padre a la caseta del francés, que estaba el hombre intrigado porque claro, desde su caseta veía el trajín que nos llevábamos p'arriba y p'abajo y seguro que se estaba preguntando que leches pasaba y nos esperaba con una sonrisa de oreja a oreja viendo como por fin su curiosidad iba a ser satisfecha.

Y mi padre que se acerca y le pregunta muy educadamente:

Buenos días, disculpe usted pero... ¿Con pantalones cortos puedo cruzar la frontera?

La cara del francés, para hacerle una foto, los ojos como platos y la mandíbula desencajada del asombro....

Pues clago segnor!!! clago que puede usteg grusar la frontera!!!

¿Seguro? Así en pantalones cortos

¡¡¡Pues clago!!!! no hay proglema segnor!!!

y las nenas (señalándonos ostensiblemente) ¿Así van bien para cruzar?

Clago que si!!!!

¿Puede usted decirle al policía que si, que podemos cruzar?

Y el francés que saca medio cuerpo por la ventanilla y le hace señas al policía diciéndole que si, agitando los brazos en un claro signo de que pasen, que pasen.

Muchas gracias.!!!

Y allá que nos vamos para el policía español, casi corriendo, mi padre que le grita de lejos al policía mientras entramos en el coche ¡¡Me ha dicho que si!!!! el francés que seguía con medio cuerpo fuera indicando que si, que podiamos pasar, arranca el coche y el policía nos deja pasar.

No os lo había contado, pero mi padre era un hombre de muchos recursos...

Siempre me he imaginado al francés, esa noche al llegar a su casa, saludando a su mujer:

Hola cagiño, no te vas a creguer lo que me ha pasado hoy.... estos espagnoles están como cabgras, pues no me viene uno hoy y me pregunta....





Continua en: http://www.latentaciondeeva.es/2009/08/que-sera-que-sera.html

Anecdotrón

Ayer sábado hubo comida familiar en mi casa, vinieron mi hermana, mis sobrinos y mi madre. Despues de comer, en la sobremesa, me comentó mi sobrino que había leido mi post sobre las gorras, resulta que aunque ha oido la historía mil veces, pensaba que las gorras que llevabamos eran "normales" y que cada uno llevaba una gorra diferente, ha oido la historia mil veces pero hasta que lo la leyó no entendió la "esencia de las gorras"

El caso es que empezó a leer el blog y a enseñar algunas entradas al resto de la famila, y fue cuando surgieron los comentarios del tipo "y lo de xxx no está?" o "no tienes la de cuando...", "y aquella de..." creo que nunca mis sobrinos han estado tan interesado en las historias de la familia.

Yo siempre he pensado que todas las familias tienen sus anecdotas y nunca me he parado a pensar si las anecdotas de mi familia son más peculiares que las de otras familias. Es cierto que los miembros de mi familia tenemos todos un caracter que como he dicho alguna vez podría definirse como "muy nuestro" pero siempre he pensado que a pesar de eso somos una familia más o menos "normal".

Mi madre es muy aficionada recordar momentos pasados, bueno, creo que toda la familia lo somos, no es extraño que una comida familiar acabe con el desojone general al recordar alguna anecdota divertida. Cuando mi madre cuenta alguna historía, mis sobrinos suelen gritar "Atención, Atención, ANECDOTRON!!!" que es como han bautizado a mi madre cuando se pone en modo "abuelo cebolleta ON".

Después del comentario de mi sobrino, me he dado cuenta de que a veces yo también me convierto en Anecdotrón, un Anecdotrón moderno que utiliza internet para contar sus batallitas y creo que es un modo estupendo de que la historía de la familia quede guardada para la posteridad.

Como mi sobrino comentó, si es que en esta familia no es que haya anecdotas para un blog, es que hay para escribir un libro, así que me vaís a permitir que de vez en cuando me convierta en Anecdotrón y os cuente la historía de mi familia.

Las gorras de los Tarín

Me vais a permitir que dedique este post a mi padre. Ya hace más de un año que murió y aún lo sigo echando de menos.

Mi padre era un hombre muy como os diria... "peculiar" Tenía lo que lo siempre he llamado "ideas de Bombero" creo que podría escribir un libro con todas las cosas que se le ocurrian, de hecho creo que daría para dos libros.

Hace muchos muchos años, cuando aún eramos una familia unida, a mi padre se le ocurrió la genial idea de que toda la familia salieramos los domingos con gorra, todos iguales. ¿Por qué? pues nunca hemos sabido porqué. Se empeñó en ello, fue una de sus muchas cabezonerías. Ahora con el paso del tiempo me da la sensación de que para él era una forma de sentir que tenía una familía. Mi padre debido a la guerra conoció a su padre a los 12 años y creo que nunca tuvieron una relación demasiado profunda, por eso pienso que para él era importante que todos fueramos identificados como familia de alguna manera.

Las gorras no eran unas gorras de esas de tela normal, no.... eran unas gorras hechas a medida, buenisimas, de una calidad superior, mi padre tenía un conocido que fabricaba gorras, atención, que estoy hablando de hace unos 35 años, entonces la gente no salía a la calle con gorra, sólo llevaban gorra los policias, los militares, la gente de uniforme o los señores mayores.

Fuimos hasta a que nos midieran la cabeza y nos hicieron unas gorras de tela escocesa a cuadros... he estado buscando algo parecido en internet, pero no he encontrado nada que se parezca ni de lejos... luego me he acordade de que hace años copié un dibujo de Sir Tim O'Theo, un personaje de tebeo que dudo que recuerde alguien, las gorras eran parecidas a la que lleva este personaje.

El tema de las gorras sigue siendo tema de conversación muchas veces aún en la familia, mis sobrinos se descojonan literalmente cuando lo contamos. Imaginaros la situación, mi padre con la gorra puesta, yo como siempre me han gustado las gorras, gorros o similares, encantada con la gorra, además me permitía meterme el pelo dentro y con eso parecía un niño, asi que yo con la gorra encasquetada y más feliz que una perdiz, mi madre, por no oirlo y no tener pelotera, con la gorra puesta, pero mi hermana.... mi hermana lloraba a moco tendido porque odiaba la gorra, que además de ser horrorosa, picaba....

Al final mi hermana salía con la gorra puesta por los cojones de mi padre, y ahí ibamos los cuatro, con la gorra de marras que más que unir a la familia servía para que mi padre pillara un cabreo del quince, mi hermana un berrinche y mi madre un mosqueo de narices, la única que pasaba de todo y que no tenía problemas con la gorra era yo. Eso si, llamar la atención, la llamabamos, ahí ibamos los tarines, bien identificados....

Era entrar en el coche y mi hermana se arrancaba la gorra, y así iba hasta que mi padre miraba por el espejo y se daba cuenta, entonces gritaba ¡¡PONTE LA GORRA!!! y ya la teniamos armada... lo que no sé es como no acabamos empotrados en un arbol por culpa de las dichosas gorras. Las gorras daban calor, picaban y te dejaban el pelo hecho un asco, yo no recuerdo cuanto duro el periodo "gorras" no creo que mucho porque mi padre igual que tenía una idea de bombero, la olvidaba, las que no hemos olvidado la historía de las gorras somos nosotras, las sufridas usuarias.

Por cierto que no tenemos ni una sola foto con las gorras....

El momento más feliz de mi vida

Si preguntas a la gente que tiene hijos cual ha sido el momento más feliz de su vida, la mayoría contestarán que fue cuando nacieron sus hijos, hay gente que dirá que el dia de su boda, o cuando les tocó la lotería.

Yo evidentemente he vivido momentos felices, guardo muchos recuerdos con cariño, vivencias muy especiales que he compartido con gente muy especial. Pero como no tengo hijos, ni me he casado ni me ha tocado nunca la lotería creo que el momento más feliz de mi vida, ese momento en el que creo que llegue a conocer la felicidad absoluta fue cuando me miré en el espejo después de que me cortaran el pelo y vi que ¡¡por fin!! me habian cortado el pelo "a lo chico".

Cuando mi hermana y yo eramos pequeñas a mi madre le gustaba vestirnos igual y llevarnos con el pelo largo porque quedabamos monisimas las dos, tan igualitas. Hasta llegó a aclaranos el pelo con camomila, tanto que hay fotos en las que aparezco de un rubio que ni Marilyn...

Mi hermana encantada de la vida porque era una niña rosa a la que le gustaba llevar falda y las cosas de color rosa, pero yo era un chicazo, me gustaba llevar pantalones y hacer todo lo que hacian los niños. ¿Conoceis a Georgina el personaje de "Los cinco"? una niña que quiere ser un niño y que va vestida como tal y se hace llamar Jorge, pues yo era igual, quería ser un niño y me vestía y actuaba como un niño, lo malo era el pelo, con una melena larga poco podía parecerme a un chico.

Cada sábado se montaba en mi casa el mismo drama, yo quería ponerme pantalones, mi hermana falda y a mi madre le daba lo mismo siempre que fueramos iguales.... una de las dos terminaba llorando a moco tendido.

No tengo ni idea de porque quería ser un niño, supongo que como mi padre quería un niño y se tuvo que conformar con dos niñitas ocupé un poco ese lugar.

La lucha que tenía en la peluquería con mi madre era siempre igual, yo quería el pelo corto y me madre quería que me cortaran sólo las puntas... lo máximo que conseguí alguna vez era que me cortaran una melenita por debajo de las orejas, eso muy masculino, no era.

Pero recuerdo un día, en que no sé si porque mi madre ya estaba cansada de discutir y que cada visita a la peluquería fuera un drama, o si fue que ya era más mayor y decidió que ya podía decidir sobre mi pelo o si es que simplemente se despistó y no le dijo a la peluquera lo que quería.

El caso es que a mi, cuando me preguntó la peluquera como lo quería yo le conteste lo de siempre: "A lo chico". Y la peluquera se puso a cortar, yo no podía creermelo cuando vi que metía la tijera y se ponía a cortar con ganas, estaba callada y como dicen las novelas románticas, trémula de emoción. Para cortarme el flequillo me puso de espaldas al espejo así que no pude ver el resultado hasta que terminó.

Cuando me dí la vuelta y me mire al espejo.... joder, aquello fue autentica felicidad :)

Otro día os contaré como me hice con unos guantes de boxeo...